El dengue es una enfermedad viral transmitida por la picadura de mosquitos infectados del tipo Aedes aegypti, especialmente en climas tropicales y subtropicales. Actualmente, es un problema creciente a nivel mundial, con un aumento significativo en México durante los últimos meses.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) explicó la dimensión de la problemática: En 2023 se reportaron más de 6.5 millones de casos y más de 7 mil 300 muertes en todo el mundo. Factores como el cambio climático, la urbanización no planificada y la fragilidad de los sistemas de salud han contribuido a la expansión de la enfermedad.

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¿Cuáles son los síntomas del dengue?

En México, el dengue está en aumento, y es crucial estar alerta a sus síntomas. Aunque muchas personas infectadas pueden no presentar ninguno, quienes sí desarrollan síntomas pueden experimentar fiebre alta, dolor de cabeza intenso, dolor detrás de los ojos, dolores musculares y articulares, náuseas, vómitos o erupciones en la piel.

Estos síntomas suelen aparecer entre 4 y 10 días después de la picadura y pueden durar hasta una semana. En algunos casos, la enfermedad se agrava y puede ser mortal.

El dengue grave se manifiesta con síntomas más severos como dolor abdominal intenso, vómitos persistentes, respiración rápida, hemorragias en las encías o nariz, fatiga extrema, agitación, vómitos o heces con sangre, sed intensa, piel pálida y fría, y debilidad general.

Es vital buscar atención médica inmediata si se presentan estos síntomas, ya que la detección precoz y el acceso a una atención médica adecuada pueden reducir significativamente las tasas de mortalidad.

¿Cómo es el tratamiento del dengue?

De acuerdo a información de la OMS, no existe un tratamiento específico para el dengue y el manejo de la enfermedad se enfoca en aliviar los síntomas. Se recomienda el uso de paracetamol para controlar el dolor y la fiebre, evitando los antiinflamatorios no esteroideos como el ibuprofeno y la aspirina, que pueden aumentar el riesgo de hemorragia. En casos graves, la hospitalización es necesaria para proporcionar cuidados intensivos.

La prevención es clave para combatir el dengue. Protégete de las picaduras de mosquitos usando ropa que cubra todo el cuerpo, mosquiteros, repelentes de insectos y manteniendo los ambientes libres de nidos.

Eliminar correctamente los desechos sólidos y gestionar adecuadamente los recipientes de agua también ayuda a prevenir la reproducción de los mosquitos.

¿Qué hago si sospecho de que tengo dengue?

Si sospechas que tienes dengue, descansa, bebe abundante líquido y consulta a un médico para recibir el tratamiento adecuado. La vacunación contra esta enfermedad está disponible en algunos países y se recomienda para ciertos grupos de edad en áreas de alta transmisión. La vigilancia comunitaria y las acciones de control son fundamentales para reducir la propagación.

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