Yasmín Esquivel: Avances históricos y desafíos pendientes para las mujeres en México
La ministra Yasmín Esquivel celebra el liderazgo femenino con una presidenta y congresos paritarios, pero destaca la urgente necesidad de cerrar la brecha de género en el poder judicial.
La ministra Yasmín Esquivel reflexiona sobre los avances históricos en la participación de las mujeres en México. Resalta que, aunque en 1917 mujeres como Hermila Galindo lucharon por ser escuchadas sin éxito, hoy el país vive un momento único con una presidenta mujer, gobernadoras y congresos paritarios. Para Esquivel, esta transformación refleja un sueño largamente esperado por generaciones pasadas. Subraya que el liderazgo femenino, como el de la presidenta Claudia Sheinbaum, demuestra que las mujeres pueden gobernar con eficacia y sensibilidad.
A pesar de estos avances, enfatiza que el poder judicial enfrenta una notable brecha de género. Actualmente, solo el 25% de los cargos son ocupados por juezas y magistradas, un contraste significativo con los logros en otros poderes del Estado. Menciona que la reforma judicial en curso busca garantizar paridad de género en 881 cargos que serán designados, lo que representa un paso crucial para incrementar la representación femenina. Esquivel resalta que, en más de 200 años de historia, únicamente 15 mujeres han llegado a la Suprema Corte de Justicia, en comparación con más de 500 hombres.
También aborda su experiencia en los tribunales agrarios, destacando las dificultades enfrentadas por mujeres rurales e indígenas, quienes a menudo enfrentan múltiples discriminaciones: por género, origen y situación económica. Subraya la importancia de un enfoque humanista en la impartición de justicia, especialmente en comunidades donde las mujeres son las principales trabajadoras y cuidadoras debido a la emigración masculina.
En cuanto a la lucha contra la violencia de género, celebra la reciente reforma a siete leyes que fortalecen los derechos de las mujeres en áreas como igualdad salarial y acceso a programas sociales. Sin embargo, reconoce que persisten desafíos graves, como el feminicidio y otras formas de violencia. Propone fortalecer la capacitación en perspectiva de género para jueces y fiscales, así como armonizar criterios entre instituciones para combatir la impunidad.
SECCIÓN JUSTICIA CON PERSPECTIVA
Eduardo Santillán, especialista en justicia con perspectiva de género, define la violencia vicaria como una agresión en la que una pareja o expareja manipula a los hijos para dañar emocionalmente a la madre. Esto incluye amenazas, maltratos o hablar mal de la madre, y suele surgir en disputas de custodia tras separaciones. Santillán destaca la importancia de visibilizar este tipo de violencia, ya que afecta tanto a los menores como a las madres.
En la Ciudad de México, la violencia vicaria puede llevar a la pérdida de la patria potestad y es un delito con penas de prisión de dos a seis años. Las mujeres afectadas pueden denunciar en el Ministerio Público o en los juzgados de lo familiar, contando con apoyo institucional.
Subraya la necesidad de legislar de forma homogénea a nivel nacional, ya que pocas entidades contemplan este delito. Además, hace un llamado a educar a los menores y promover nuevas masculinidades para prevenir esta forma de violencia.
Finalmente, insta a las mujeres a estar atentas a comportamientos extraños en sus hijos, como comentarios negativos hacia ellas por parte del padre, y a denunciar. Destaca el trabajo de la Secretaría de las Mujeres en políticas públicas y el lanzamiento de la Cartilla de los Derechos de las Mujeres.